LA ALIMENTACION Y LOS ASTROS(II)


Virgo: el análisis. (Del 24 de agosto al 23 de septiembre) 

Los nativos de este signo son los analistas por naturaleza. Si, imaginándonos el comienzo del hombre, teníamos a los Aries que abrían paso a las nuevas situaciones, los Tauro, que adquirían las cosas que más interesaban para la supervivencia del grupo, los Géminis, que hacían el comercio y se relacionaban con el entorno a través del aire…, llegan los Virgo , con un Mercurio de tierra, práctico, realista, con la capacidad que le otorga el planeta de la comunicación para poder analizar lo que le rodea y saber qué es lo que más conviene. Si tuviéramos que encontrar a un Virgo en medio de un grupo de gente, posiblemente sería un solitario, que estaría en cualquier rincón pasando desapercibido, sin hacer mucho ruido, bastante callado y con un diccionario debajo del brazo.
Virgo es un ser detallista, se fija en los menores detalles, es capaz de medir mentalmente cada hora, cada minuto para darle todo su valor. No tendrá que pedir cambio en el quiosco para comprar el periódico, seguramente cogerá el dinero justo. No es demasiado amigo de multitudes, el desenfreno es casi un pecado, por eso no suele aparecer en muchas fiestas sociales.
En Virgo, da la sensación de que está solucionando siempre un grave problema, o al menos, de estar preocupado por algo. Probablemente sea así, es natural, para él estar preocupado. Es posible que el ascendente y otras posiciones natales de sus astros puedan modificar la figura arquetípica del nativo de Virgo, pero sus ojos suelen expresar la inteligencia y claridad de pensamiento. En sus rasgos hay una pureza y una tranquilidad de expresión que  parecen la negación de sus secretas preocupaciones. Suele tener cierta gracia y encanto y, en ocasiones, muestra cierta vanidad que irrumpe en raros momentos. No se reconoce ni les satisfacen las fotos que le toman, y suelen perder tiempo frente al espejo cuando nadie le mira.

 
Les gusta ir bien arreglados, suelen ser personas menudas, nunca demasiado grandes, de músculos bien marcados, dotados de más fuerza de lo que aparentan. Poseen capacidad de aguante, sea de trabajo o de soportar un “chaparron”aunque no sea de lluvia.
Son gente confiable y sincera, aunque también son capaces de fingir una enfermedad cuando no les apetece hacer algo o ir a alguna parte. De ahí su talento latente de actores. Minuciosos y pulcros casi para todo, sus arreglos, sus comidas, su trabajo, su vida. Tienen ideas precisas sobre la salud y poca paciencia con la haraganería. Se hacen pocas ilusiones sobre la vida y la gente, y ciertamente, ni un romance ni nada parecido les hace perder el norte ya que saben bien donde pisan. También los hay que poseen cierto humor mercuriano inteligente e irradian un encanto difícil de resistir pero si en algún momento se sienten molestos por la vulgaridad, la estupidez o el descuido, pueden ponerse hoscos, irritables, gruñones y nerviosos. Por lo general son dulces, gratos de tener cerca y los primeros en buscarte ayuda si te duele la cabeza.
Virgo cuando viaja, lleva la farmacia portátil, con pastillas y solución para casi todo. Si está acostumbrado a un tipo de jabón, éste también viaja, no sea que no haya en el lugar donde va a pasar unos días. Los hábitos los mantienen tanto si va de vacaciones o hace un viaje de negocios.
Virgo puede criticarte algo con argumentos rebuscados que te vuelvan loc@ pero seguramente si estás en un aprieto se apresurará a poner las cosas en orden sin otro afán que el de ser útil. Virgo es rápido para negar sus hábitos y rasgos de carácter, es ciego para sus propios defectos e incapaz de ver sus debilidades bajo la misma clara luz que le permite ver las de los demás. Hay que nombrar el verdadero regente de Virgo, Vulcano, que le otorga valor y confianza y le libera de las tensiones que le provoca Mercurio, más propio de los signos de aire y no de tierra como Virgo.
Palabras que le definen: prudencia constante, poca ostentación con el dinero, conservadores con mesura, no les gusta el derroche y el despilfarro, observadores del más mínimo detalle.

 
Les gustan los animales, gatos, pájaros, los seres pequeños e indefensos. Aman la verdad, la puntualidad, la economía, la prudencia y una discreta selectividad. No soportan los sentimentalismos desmedidos, la suciedad, lo vulgar, el abandono…
El frescor del verde y la pureza del platino es lo que le trae suerte aunque la buena suerte de Virgo va seguida por varios tipos de soledad y la llamada del deber jamás de acalla del todo en su corazón. La gran mayoría de los nativos de este signo viven tan aferrados a la tierra, a lo práctico y realista, que pasan de los sueños, de los cuentos de hadas y de todo lo que no se pueda tocar y analizar de cerca. Siendo un signo que siente y que es poseedor de una gran sensibilidad, el intento de adentrarse en sus emociones le resulta muy difícil pues intenta razonarlas con la mente. Debería aprender a desconectar de vez en cuando, disfrutando de las cosas simplemente por sí mismas y en el presente, trabajando la sencillez y aceptando que hay muchas cosas que se nos escapan al razonamiento.
Personajes de Virgo: Laureen Bacall, Reina Isabel I, Greta Garbo, Goethe, Elia Kazan, Lafayette, Sofía Loren, Cardenal Richelieu, Peter Sellers, Ingrid Bergman…
En resumen: signo de Tierra, Mutable, regido por Mercurio (hasta la llegada de Vulcano al horóscopo), representado por Ceres, diosa de la agricultura, las cosechas y la fecundidad en la mitología romana, joven con una espiga en la mano representa la relación naturaleza-hombre, madurez y fruto. A la tierra pesada y fértil de Tauro sigue la Tierra que ofrece el fruto de su trabajo. Es la Tierra de las mieses, un elemento concreto que descansa antes de prepararse para las próximas cosechas. Lo que recogió Virgo permitirá la supervivencia durante el invierno: previsión de futuro con sentido práctico. Necesidad de autosuficiencia. Consciente del valor del trabajo, del esfuerzo, de la responsabilidad, sabedor de que cosechará aquello que se ha sembrado, Virgo analiza, reflexiona antes de actuar.
Marca el final de la estación del calor, cuando comienzan a acortarse los días, se inicia un periodo de transición, es signo de Tierra y busca adaptarse a las realidades de la vida cotidiana.
Como hemos dicho anteriormente, está regido por Mercurio, pero no el Mercurio travieso de Géminis, sino  el  inventor del alfabeto, la astronomía, las matemáticas, la transcripción musical, pesos y medidas etc.…
Este sabio Mercurio le hace a Virgo previsor, exigente, selectivo y servidor de los intereses ajenos. Busca el conocimiento y a práctica de lo que aprende, racionaliza, concreta, posee el sentido de los valores, la organización, la salud.

 
En lo que respecta al tema alimentario, a Virgo le interesan la nutrición y la dietética; nada de excesos, comida sana y sin despilfarros. Ciertamente esto se da en los Virgos arquetípicos, los puros, ya que algún nativo con aspectos rojos, planetas mal situados en el momento natal puede resultar lo contrario: comer en exceso, incluso cosas que sabe le perjudican.
El Virgo puro ama los manteles limpios, las ensaladas sanas y llenas de vitaminas, los platos sencillos y biológicos, los complementos vitamínicos, minerales, cereales, frutos secos, hierbas aromáticas y medicinales…
No es amante de salsas pesadas y picantes, los platos feculentos, y todo cuanto agrede a su aparato digestivo. No suele cometer excesos y a menudo conserva un aspecto joven, sano y envidiable.
Virgo es capaz de seguir cualquier tipo de dieta o preparar con esmero comidas sencillas, sanas y completas. Un plato sencillo y saludable que podemos recomendarle a Virgo es la sopa de tomillo.